Si vamos a buscar fabricas y mano de obra que cumplan con precios y tiempos para crear nuestros productos tecnológicos, creo no equivocarme en decir que la solución la mayoría de las veces la vamos a encontrar en el continente asiático, muestra de lo que digo es que compañías como Apple tienen sus fabricas por ese lado del mundo.
En Asia existe un poder de manufactura superior a cualquier otra parte del mundo, pero también es cierto que las condiciones laborales de todos quienes trabajan en esas fabricas dejan bastante que desear, basta con recordar la larga lista de incidentes en que Foxconn se ha visto envuelta por este motivo, donde incluso piden en sus contratos a los trabajadores que estos no se vayan a suicidar, a ese nivel de condiciones laborales estamos hablando, jornadas fuera de cualquier horario legal y pagos que están lejos de ser justos, eso es parte de la realidad que muchas compañías fabricantes de componentes y dispositivos deben vivir en varios países de Asia.
Los casos de “maltrato laboral” son muchos, pero cuando aparecen compañías como Samsung entre los acusados todo toma mucho más fuerza, como en este caso donde la firma surcoreana tendrá que indemnizar a más de 200 trabajadores aquejados de enfermedades ocasionadas por trabajar para Samsung.
El tema es tan grave que la compañía tuvo que salir a pedir disculpas públicamente a todos los trabajadores que se vieron afectados por sus deplorables condiciones laborales, condiciones que los habrían llevado a padecer cáncer y otras enfermedades graves provocadas por exposición a sustancias dañinas para la salud.
Lo de Samsung no es nuevo, ya existen investigaciones de muerte de trabajadores desde el 2012 donde la Korea Workers’ Compensation and Welfare Service concluyó que la muerte de una trabajadora de 36 años tendría como origen directo el haber trabajado en las fabricas de marca. La exposición del trabajadora por 5 años a materiales radioactivos y solventes la habrían llevado a padecer cáncer de mamas, lo que finalmente la llevó a la muerte.
El caso de esa trabajadora de 36 años es solo el inicio de una serie de casos reportados en contra de la compañía, a la fecha van cerca de 200 casos de trabajadores afectados por distintas enfermedades, en donde algunos casos han representado problemas congénitos incluso para los hijos de las víctimas lo que ha llevado esto a un nivel preocupante, tanto así que no solo se les obligó a pedir disculpas publicas, también se exigieron indemnizaciones para los trabajadores que llegarían a los 150 millones de won (unos USD$ 132.000) por cada caso, algo que de seguro será el inicio de una ola de nuevos reportes médicos de todos los trabajadores que tengan problemas de salud producto de haber trabajado para Samsung.
Según Kim Ki-nam, copresidente de la compañía:
“Nos faltó ser considerados con todas esas enfermedades y no resolvimos rápidamente el tema”
Por parte de los afectados habló Hwang Sang-ki, padre de un trabajador de Samsung que falleció de leucemia en el 2007:
“No puedo olvidar todo el daño causado a Yu-mi y a mi familia”
La legislación laboral en algunos países de Asia es realmente perjudicial para los trabajadores, pero también tenemos que ser honestos en asumir que en los últimos años todo avanza hacia mejores condiciones laborales por esos lados del mundo, los gobiernos han sido enérgicos y están exigiendo mejores condiciones laborales para los trabajadores, desde la cantidad de horas que se trabaja, la implementación y las mismas instalaciones donde realizan sus labores, lamentablemente existe una cantidad importante de trabajadores que no contaron con este cambio a tiempo y están pagando las consecuencias con su salud.
Muy posiblemente el castigo impuesto a Samsung se replique en otras compañías que hace bastante tiempo arrastran problemas similares, pero esto tardará bastante en un lugar del mundo donde hay tantas fabricas de dispositivos tecnológicos como farmacias hay en tu ciudad.
Autor: Elias Villagrán Donaire.